Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for the ‘Sociedad’ Category

Señores, me gustan los toros. Ya lo se, a unos les parecerá muy bien y a otros muy mal, pero como soy mayor hay cosas que no discuto: A mí, me gustan. Y no pretendo que sea algo lógico ni racional; son tripas, simplemente disfruto. Esto debe ser como la fe, se puede racionalizar, pero finalmente por más que te tortures con explicaciones, o la tienes o no la tienes.

Pues bien, dentro de esta extraña pasión, para mí existen «hitos» que espero y repito cada año, conjuntamente con el primer partido de liga, la lotería de Navidad en la radio, la procesión del Carmen, el paso de la Legión el día de las Fuerzas Armadas o en este caso, los encierros de Pamplona.

Cada mañana de San Fermín me organizo para poder ver el encierro en directo, sea poniendo el despertador aunque no me tenga que levantar, sea organizando la mañana para que me de tiempo con calma a ver el proceso previo, el encierro y las posteriores repeticiones.

En mi caso la emoción del encierro es indirectamente proporcional al número de heridos, payasos vestidos de todo tipo de gilipolleces, muchedumbres que imposibilitan las carreras, turistas que quieren hacerse una foto con un toro o como este año, muertes en directo.

Pero lejos de comentar o juzgar el porqué ha muerto gente este año o cualquier otro, que esto nos puede dar para otro post que acabaría en lugares comunes; me ha impresionado terriblemente la falta de dignidad, de ética, ya no se ni como describirlo, generalizada:

¿Qué hacía la foto de este pobre chico en la portada de todos los periódicos?

¿Qué tiene de información un primer plano de un moribundo descerrajado por un toro?

¿Dónde quedó el respeto? ¿Es la muerte en directo un espectáculo de masas?

Quisiera ponerme en la piel de los protagonistas:

– La víctima

Voluntariamente acudió al encierro, conocedor de los riesgos los asumió con mala suerte porque la parca ya había señalado el día como suyo. ¿Le hubiese gustado verse en la portada de casi toda la prensa nacional muriendo? ¿Son suyos los derechos de copyright?

– La familia

Tu hijo ha muerto. De un momento para otro. En una fiesta. A las 7:55 en un SMS te decía que estaba ya calentando ¿Quieres ver como agoniza, grabar para siempre en tu memoria su cuerpo roto con su cara aún consciente de lo que está pasando?

– El lector

Quizás compraste tu periódico de todos los días sin siquiera saber si la foto era el producto de una bomba iraquí más o de un chaval de Alcalá muriendo. Por terrible que parezca y aunque el resultado es el mismo, no tiene el mismo impacto, por eso no nos ponen todos los días los cuerpos de la guerra agonizando. ¿Te cabreaste pensando en el daño que provocaba la foto o seguiste leyendo sin pensar? ¿Te has sentido informado alguna vez viendo los pantalones meados de los ahorcados?

– El editor

O quien carajo decida la foto de portada. Tenías x fotos, y elegiste sin duda la más impactante. ¿Para qué? ¿Cuál era el objetivo? Por supuesto la movilización de conciencias no cuenta por poco creíble. ¿Vendiste más ejemplares ese día? Lo dudo, porque las televisiones también se dedicaron a repetir la jugada todo el día anterior. ¿Qué has conseguido llenando la portada de sangre? ¿Dónde está la noticia?

Yo sólo puedo recordar la cogida de unas horas más tarde, en este caso sin muertos. El toro desnuda a una persona con la que se había encelado después de zarandearlo como un muñeco una y otra vez. El hombre sabía que se moría y ¿sabéis que hacía en ese último minuto? Taparse los genitales. Taparse las vergüenzas hasta en el momento de la muerte.

Read Full Post »

A mí las crisis no me inspiran nada, nada.

Me cuesta mucho menos ver la realidad llena de esperpentos en los momentos en los que todos están felizmente engañados con su momento de prosperidad. Pero hacer caricaturas ahora mismo, sería terriblemente cruel.
A mí me divierte imaginar padres puteros en las postales de familia todos vestidos de blanco, me gustan las catequistas salidas, los directores financieros ladrones, los parvulitos cabrones, la falta de ahorro en la riqueza. No se como definirlo, porque la vida es canalla en mi universo cuando la tristeza está en las segundas capas y ahora mismo el panorama para los alegres ciudadanos del despilfarro, está muy muy chungo.
Ha llegado el lobo!
Felices compradores de bolsos de marca a crédito, compradores del sueño del pelotazo en un piso con cincuenta años de hipoteca, recién licenciados de 40 mil euros al año, arrogantes de dos días de éxito y ninguno de esfuerzo…uff, esos nietos de la postguerra reconvertidos en consumidores, que se han pasado estos años dejando a sus abuelos cobrando una mierda de pensión, mientras miraban para otro lado. Todos calladitos. A los viejos y a los pobres, ni mirarlos. No existían.
Pues los abuelos que ya se habían ido a la mierda, ahora más. Y los nietos, a currar lo que vale la pasta, el que tenga curro y el que no lo tenga, a casa del abuelo, a vivir de la pensión que no defendió como debía.
Y yo me pregunto, ¿Dónde está el cementerio de las necesidades adquiridas? ¿Y ahora qué?

En medio de esta vorágine de vuelta a la realidad, la vida se vulgariza en lo material y espero, crecerá en lo espiritual. Una lástima tener que llegar a este punto para ver cambios en las actitudes. Insisto: espero.
La otra opción es que nos acuchillemos por las calles.

Pues en medio de la tormenta los fabricantes de hamburguesas a 1 euro se están forrando. Por otra parte la forma más limpia de tener controlado el terrible aumento de la población! Y todo el mundo tirando precios, y ¿ Cómo hace uno para bajar el precio de unos productos que hemos estado comprando al 500% de su valor real? Esto es, sin llamarnos gilipollas a gritos. Pues nada, la solaridad de las marcas blancas!
«Te entedemos oh amigo, y por eso vamos a fabricar la misma mierda, la vamos a empaquetar en una caja más barata, le vamos a quitar el marketing, la mitad de intermediarios y fontaneros; nosotros seguimos ganando lo mismo. La cadena de ladrones y trabajadores que se joda y Usted querido amigo, encantado con el nuevo precio y nuestra actitud solidaria, pues corriendo de nuevo al centro comercial»
Bienvenidos a su nuevo mundo en low cost!
En donde los de siempre se siguen forrando, los de abajo comprando y a los que les pille en el medio…pues reconversión. Y pensión del abuelo.

Si llegas a una de esas grandes cadenas (no a un pequeño comercio en liquidación!) que se han zampado a los negocios tradicionales, y donde el año pasado ponía 50€, ahora pone 30 y además llegado Enero hacen una rebaja del 50%:
¿Sentirás mucha lástima por el pobre imperio textil que debe perder pasta o se te quedará una cara de soplagaitas que te durará hasta Marzo?

Para bien o para mal, esto es el final de una etapa que duró unos 60 años y que explotó finalmente por la codicia de todos, los últimos 15. El mundo de las empresas llenas de assistants de controller del area manager de los EMEA process of quality para España, de empresas perdiendo pasta que contratan a 4 mil empleados ya continuación salen a bolsa!, de tomates a 8 euros el quilo, de pisos en Carabanchel a 80 millones de pelas…todos subidos a un tiovivo que no para, pero por tiovivo, tampoco avanza. Y venga brindis mientras suene la música!

En fin, ahora de verdad siento mucha curiosidad por ver como nos lo vamos a reinventar o mejor dicho, por ver como nos lo van a vestir para volvérnoslo a vender.

En cualquier caso, y como prueba de que las cosas en su esencia tampoco cambian tanto, un escrito de 1934:

Que el mundo fue y será una porquería
ya lo sé…
(¡En el quinientos seis
y en el dos mil también!).
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos,
valores y dublé…
Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos
en un merengue
y en un mismo lodo
todos manoseaos…

¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!…
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro
que un gran profesor!
No hay aplazaos
ni escalafón,
los inmorales
nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
¡da lo mismo que sea cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón!…

¡Qué falta de respeto, qué atropello
a la razón!
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y «La Mignón»,
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín…
Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia
contra un calefón…

¡Siglo veinte, cambalache
problemático y febril!…
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil!
¡Dale nomás!
¡Dale que va!
¡Que allá en el horno
nos vamo a encontrar!
¡No pienses más,
sentate a un lao,
que a nadie importa
si naciste honrao!
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley…
Cambalache, Dionisio Santos Discépolo

Read Full Post »


*Foto: Ventana en la City, Londres

En el mes de Agosto fui a misa en la Catedral de Barcelona. No soy una persona practicante, en realidad ni siquiera creyente, a mi pesar; pero lo cierto es que una buena homilía y la sensación de comunidad de las iglesias siempre me hacen reflexionar, por lo que debo reconocer que suelo salir «mejor» de lo que entré.
La ocasión era perfecta por el entorno y porque supuse que la homilía de misa de 12 de domingo en una «sede» de semejante importancia no podía estar en manos de un «piernas», como así fue. El mismísimo Cardenal en persona demostró que para estar en ese puesto los enchufes no funcionan. Hasta este nivel del escalafón la institución es pura meritocracia.
Su Eminencia con gran claridad afrontó un tema para la reflexión: La incertidumbre.
¿Nos hemos acostumbrado a asumir que todo en nuestro entorno es seguro?
Aseguramos nuestras casas, reaseguramos nuestra salud con seguros privados, aseguramos nuestros coches, los colegios de nuestros hijos… como decía el Cardenal contratamos seguros que nos imdemnizan si hace mal tiempo en vacaciones!
¿Es eso la vida?
¿Vivimos de verdad endiosados en un pretencioso mundo sin problemas?
O ¿Son unos parias los que tienen la desgracia de encontrarse una piedra en el camino?
¿Si eres viejo o estás enfermo te conviertes un deshecho inservible a esconder?

El otro día oía a una persona comentar que iba a matricular a su hijo en el método Kung «para ayudarle a prepararse para el estudio», en otras palabras para intentar evitar un problema de concentración o mala canalización de su energía hacia el trabajo. «Es que su profesora me ha dicho que debe concentrarse más». El tema no estaría mal, primero si viviésemos en una cultura oriental y segundo si el niño en cuestión no fuese un parvulito de 4 AÑOS!
¿Qué pretende una madre que intenta evitar a su hijo un más que teórico sufrimiento futuro en su potencial mal rendimiento escolar? Asegurar su éxito en la medida de lo posible, que en este caso consiste en comprar una póliza que garantice unas buenas notas. La mayoría los padres modernos persiguen una inútil y perversa carrera de evitar sufrimientos por la que en Caperucita Roja el lobo, debe ser vegetariano.

¿Puede ser alguien maduro sin sufrir, sin enfrentarse a problemas? No.
Los problemas, en su justa medida a cada edad, no son más que parte fundamental del camino a recorrer, parte del esfuerzo que es necesario realizar para ser feliz.
¿Puede ser feliz un niño sin problemas? No.
Desde que el mundo es mundo los niños nacen, a continuación tienen cólicos dolorosos, no duermen por las noches y lloran, tienen pavor cuando alguien extraño los aupa, tienen miedos nocturnos, se angustian pensando que sus padres se pueden morir, se llenan de complejos en la adolescencia, … Esto ocurre desde que el mundo es mundo, son etapas, y aquí estamos todos unos más cuerdos que otros, pero aquí estamos. Quizás tiene que ser así, a medida que la inteligencia camina, los problemas aumentan simplemente porque aunque ya estaban ahí, somos conscientes a medida en que nuestra inteligencia está preparada.

¿Y un adulto? ¿Puede ser feliz un adulto sin problemas? No.
Lo que puede es ser tonto. Por lo que ya tendría el primer problema. (O ser «feliz e indocumentado», pero eso puede dar de sí como para hacerme otras 50 líneas en este blog)

¿Entonces porqué empeñarnos en rodearnos de «un mundo feliz» y no dejar que las cosas fluyan con naturalidad?
Obviamente no soy partidaria de dejar que la casa arda y vanagloriarme de tener las pelotas de «hacerlo a pelo», obviamente he contratado un seguro doméstico; pero en la vida en general asumo que los problemas forman parte de mi existencia. Tengo enfermedades, mis hijos tienen cada uno sus «taras» como la mayoría sin importancia, seguramente tendrán sus problemas en el colegio o después… pero todo llegará y cuando llegue, ya veremos. No les voy a robar ninguna etapa pretendiendo asegurar, si es que se puede llamar así, la siguiente.

Hemos vivido unos años de bonanza en los que parecía que nos habíamos comido el mundo, un mundo paradisíaco de trabajo asegurado, de consumo sin límites, de viajes exóticos obligatorios para ser feliz, de colas para comprar IPhones agotados a 300 euros, de puentes en la nieve, de coches cada pocos años, de plusvalías en casas con valor por tu sueldo de 100 años, de caras sin arrugas, de tetas de plástico, de niños con mini todoterrenos eléctricos…Todo la gran mentira de la felicidad enlatada.
¿Y ahora? ¿Qué va a pasar cuando todos estos que creyeron que por fin habían conseguido su paraiso de la seguridad se queden sin trabajo? ¿Qué va a pasar con todos los que pensaron que eso era ser feliz?
¿Va a ser esta en realidad no una crisis financiera provocada por unos miles de hijos de puta que nos han estado robando, sinó una crisis cultural, el final de una civilización tal y como la conocemos?

Ha llegado la realidad a sus vidas, señores, espero que tuviesen en su cartera algo más que dinero.
Y afortunado el que confía en que Dios existe.

Read Full Post »

Supongo que en en este espacio muerto del veraneo español casi nadie habrá leido la noticia de la agresión a Jesús Neira. Estoy casi segura que de no ser por Isabel, su mujer, una peleona incansable; su caso habría sido como todos, un momento en la zona de sucesos.

Conocí a Jesús hace veinte años, era mi profesor de Teoría del Estado en la Facultad. Un tipo extremandamente inteligente, avanzadísimo para la Universidad de la época y supongo que aún más avanzado para la de hoy. Divertido y generoso como amigo, abría su casa a charlas que duraban hasta la madrugada. Jesús, como ha demostrado, es sobre todo una de esas personas que fundamentalmente es buena gente.
Siempre enseñaba su cicatriz cuello-abdomen, fruto de una operación a vida o muerte que a los 20 años le había cambiado el rumbo a su existencia. Estoy segura de que jamás pensó que un tipejo en la puerta de un hotel de Majadahonda iba a ser de verdad el protagonista.

Muchas veces me he acordado de él en estos últimos años sin contacto, porque debo agradecerle la mayoría de las estructuras de análisis de la realidad política y social que existen en mi cabeza.
El profundo creyente de las «libertades estructuradas», que desde el conocimiento de las instituciones es capaz de defender Estados y justicias conociendo las «tripas» y realidades políticas. Sin perder la ilusión. Con una ética, como ha probado, a prueba de riesgos personales.
No tengo intención de hacer una necrológica de Jesús que está vivo, pero era necesario explicar mínimamente su perfil para desarrollar mi reflexión posterior.

Recuerdo los juegos de Jesús tirados en el cesped de Somosaguas, en concreto uno muy conocido sobre la culpabilidad en la muerte de una mujer cuyo marido tenía «abandonada», al cruzar ella un puente en el que sabe que hay un asesino. El ejercicio, que tenía como objetivo hacer discutir a los alumnos sobre la relatividad de la «verdad», consistía en presentar una trama con personajes relacionados, para decidir cual de ellos era el culpable del crimen. Como en todo, el ejercicio es sobre todo un ejercicio, un análisis de tu análisis que te enseña a ver el poliedro de la justicia relativa.
En la realidad de Jesús, por desgracia, la historia en cierta forma se repite:

Un hombre (Jesús) ve como otro (Antonio) ataca a su mujer, acude en su defensa y el marido se vuelve, lo ataca por la espalda y de un golpe lo tira al suelo. Los servicios de emergencias lo mandan a su casa después de comprobaciones traumatológicas sin darle importancia al golpe recibido en la cabeza. En los siguientes días acude a distintos servicios de hospitales quejándose de fuertes dolores en la cabeza,sin que se le realice ninguna prueba extra dado que el caso aparentemente no reviste gravedad. Jesús es una persona que está medicada por una cardiopatía importante.
Al cuarto día tiene un derrame cerebral. Permanece en coma inducido hasta hoy.

– Jesús: Increpa a Antonio por pegar a su mujer y como consecuencia de ello recibe un fuerte golpe de Antonio, que lo postra en un coma después de unos días. Había acudido a distintos médicos sin conseguir que le realizasen un tac cerebral.
– Antonio: Dice haber ayudado a Jesús al ver que se caía, le preguntó que tal estaba y este contestó que bien. Está a tratamiento psiquiátrico y posiblemente bajo los efectos de alguna droga.
– La mujer de Antonio: Agradece mucho a Jesús su actuación creyendo que estaba siendo maltratada pero se niega a presentar denuncia contra su marido. Su marido nunca la ha maltratado, sólo estaba nervioso por la medicación.
– Los médicos: Atienden a Jesús hasta en 4 ocasiones sin hacerle pruebas a sus lesiones cerebrales a pesar de su condición de cardiópata y sus repetidas visitas a hospitales quejándose de fuertes dolores de cabeza. Finalmente se produce un derrame cerebral el cuarto día.
– El Ministerio/las administraciones: Deciden que Antonio a pesar de sus antecedentes de violencia esté en la calle con un tratamiento que finalmente no controla sus ataques de ira.
– El Ministerio/las administraciones: Creadores de los protocolos médicos que no realizan las pruebas médicas ni en la primera atención de urgencia, ni en las posteriores.

¿Quién es el culpable? ¿Existe un solo culpable?

Lo único que se, es que al igual que en el ejercicio, existen miles de respuestas y ninguna de ellas será completamente correcta. Es evidente que el que da el golpe, es culpable. Pero la mujer que disculpa al animal, también lo es. Los médicos que no hacen las pruebas correctas…el juez de vigilancia de este elemento…
Lo peor del ejercicio, que es la realidad de la vida, es que siempre habrá alguien que piense, aunque no se atreva a decirlo, que el culpable es Jesús.
Por meterse en líos.
Terrible.

Read Full Post »

Nada más lejos de mi intencion que hacer de este blog “uno más en medio de un enjambre de comepollas tecnológicos” pero hoy la tecnología se convierte en hecho social: Telefónica lanza el IPhone!

¿Qué puede estar pensando alguien que ha hecho cola desde ayer noche? ¿Qué puede tener dentro de su cabeza a parte de gilipolleces y el gran marketing de la marca?¿Cúal es el valor diferencial que obtiene desde hoy si consigue el aparato?

¿Los primeros 50 pringaos, están pagados por Apple?¿Qué más da tenerlo hoy o mañana en caso de que lo necesites para algo?

Me decía hace un par de días un amigo con un gran puesto en un banco que “correrá sangre por las calles con la que se nos viene encima” ¿Es la compra de una chorrada convertida en el “must” de los teléfonos un refugio para el miedo?

Yo personalmente pienso que este tipo comportamiento es del que recogemos estos lodos.

Sin ánimo de ser eco-sostenible-pueril y tampoco demagoga, me sigue costando mucho entender cómo en un país al que se le acerca un periodo muy complicado, con la gente aún llegando por miles en los aeropuertos y muertos por mar creyendo que esto es la tierra prometida; tengamos el lanzamiento del IPhone en la portada de toda la prensa nacional.

¿Cuándo empezó esta mentira? ¿Cuándo nos la creímos? Y lo peor ¿Porqué la gente se la sigue creyendo?

Intento entender la vida de los demás, de verdad con profundo respeto, pero este tipo de comportamientos me llevan a extremos en los que nunca quería haber estado, me hacen dudar terriblemente sobre la capacidad del personal que me ha tocado en gracia en el camino.
Cada vez más me gustaría volver a los años 60, vivir movimientos que quizás eran también mentira, pero cuando menos provocaban avances sociales; pero no, me ha tocado vivir una época en la que sólo muy ocasionalmente la gente se moviliza por un bien común que por cierto pasa rápidamente, en cuanto la portada del periódico cambia la causa tan coreada desaparece, es olvidada y a otra cosa.
Fast food, peluquerías express, tintorerías express, lentillas de usar y tirar, coches para 4 años por leasing, novios de un polvo, trabajos de 2 meses, triunfos por lotería sin esfuerzo, médicos importados para urgencias de niños mimados con 2 décimas de fiebre y causas justificadas por una portada de consumo diario. Vivan las tragedias gracias a la CNN!
Las últimas veces que vi a la gente movilizarse por orden temporal: Triunfo de la selección en la Eurocopa, algún triunfo de chavalitos con novias modeletas grandes héroes de la era en la liga, manifestación después del 11M juzgado y nunca aclarado, manifestación por Miguel Angel Blanco con una ETA que volvió a tener apoyos sin que nada hubiese pasado 2 días más tarde.
Se acabó, ya hemos cumplido con los movimientos en pro de las causas.
Ya tenemos justificación para hacer cola toda una noche para comprar una mierda de aparato con un valor que podría evitar que 3 tíos cruzasen el estrecho cada año.

Al final tengo que ser demagoga.

Read Full Post »

Esta tarde he visto a una novia saltando las obras de Gas Natural en Bravo Murillo. Pensé que los juzgados de Plaza de Castilla estaban cercanos y que acababa de salir de allí, pero el semáforo en el que estaba parada debía estar como a 5 manzanas.
5 manzanas de calle atestada con obras en la acera caminando vestida de novia, con ramo en la mano, un novio con los papeles del matrimonio en la mano a su lado, una familia vestida de fiesta caminando detrás.
¿A dónde puede ir una novia así a las 6 de la tarde en un Madrid de verano?
¿Puede funcionar un matrimonio que empieza un jueves de Julio en esas circunstancias?

Me la imagino contándole a sus hijos su boda:
«Nos casamos en 10 minutos con un funcionario que leyó los artículos correspondientes del código civil. Recuerdo que era calvo y muy amable.
Tu padre y yo nos fuimos con los abuelos a tomar unas cañas a Tetuán. La calle estaba completamente llena de gente que compraba en las rebajas y era imposible caminar saltando los agujeros de las cañerías.
Yo iba vestida de novia, de largo, con un ramo primaveral en tonos lilas. Tu padre emocionado llevaba una carpeta con gomas de color verde con el certificado sellado dentro. La apoyó en la barra del bar de pinchos y la mojó con el cerquillo del vino del abuelo, desde entonces siempre ha tenido este olor a priorato.»

¿Es este un fast-matrimonio? ¿Un matrimonio basura? ¿El drive-in de los matrimonios?

¿Alguna vez esta mujer pensó en casarse así? ¿Soñó cuando era pequeña con su traje de novia arrastrado por los agujeros de Bravo Murillo? ¿Su padre se imaginó no-padrino de una boda de cañas por Tetuán con 8 invitados?

Debería estar prohibido casarse un jueves en Madrid a las 6 de la tarde.

*Mi admirado también tiene algún momento de reflexión sobre el mismo tema. Disfrutadlo.

Read Full Post »

Reconozco que disfruto con la polémica. Soy una tocapelotas en busca de personajes susceptibles, tengo que reconocerlo.

Normalmente cuando uno tiene este vicio, en mi caso espero que no insultante, sino únicamente «removedor»; busca contrincantes que vivan en la sanísima condición de la duda y evita contrincantes «categóricos».

¿Cuándo dejaron las escuelas de enseñar el placer de la retórica? ¿Cuándo se dejó de discutir en los cafés con el único objetivo de discutir?

Dentro de mi cultura, gallega, existe una norma no escrita (positiva o negativa), una especie de estigma del comportamiento, por el que las cosas que se dicen, se dicen para ser interpretadas con todas sus capas, pensando en lo que se deja de decir, buscando el motivo por el que se dice o no.
Quizás siempre desconfiando o respetando la inteligencia del «contricante» por defecto.
Por lo tanto el que las escucha debería tener en cuenta la posiblidad de que sean una verdad completa, una verdad parcial, o la única verdad que en ese momento puede ser capaz de expresar alguien.
¿Es una cultura defensiva? ¿Desconfiada?
No lo se. Pero sin duda es una cultura que disfruta con el lenguaje y que sobre todo disfruta con la discusión.
Soy una convencida de que la discusión es fuente de salud mental, siempre y cuando el que está del otro lado sea capaz de entender que en el fragor del debate no existen implicaciones personales, que no importa quien seas, que no se busca el ataque; simplemente se disfruta discutiendo.
Pues últimamente me resulta encontrar nuevos personajes para mi hobby.
No hay más que categorizaciones sin salida, que en mi opinión son aburridísimas
¿Para qué plantearle a alguien una discusión sin salida?
¿Dónde está el juego de la negociación? ¿No hay trampas? ¿Ya no existe la dialéctica?
¿O los únicos «dialécticos» que nos quedan deben ser elegidos entre la lista de pedorros pedantes autodenominados intelectuales (quien no recuerda en esta frase al «rey del pollo frito») o la lista de «tertulianos a sueldo de cualquier lobby» de las mañanas de la radio?
Qué triste panorama. ¿Es este el motivo por el que la gente en general ha perdido la costumbre de discutir y por eso ya no saben hacerlo? ¿Porque no hay referencias?

La verdad, cada vez más veo que existe una falta de base cultural y no hablo de lectura que también, sino mucho más de formación personal.
¿Tenemos a las generaciones más formadas de toda nuestra historia convertidos en analfabetos funcionales? ¿Cómo es posible ser joven y no idealizar? ¿Porqué esta apatía generalizada? Condena al que proteste! Condena al que levante el dedo para decir que esto no funciona! Cortenle la mano al que dude!
¿Son todos víctimas de la Logse o de sus padres? ¿Son víctimas o aspirantes a seguir «chupando» del sistema hasta que dure?

Mejor no plantearselo, cualquier día me detienen.

Aquí un regalo: Era el objetivo tocar o despistar? 😀

Read Full Post »

Cuando uno tiene la buena o mala suerte de nacer con responsabilidad sólo le cabe aceptar que pertenece a ese porcentaje del mundo, el número lo desconozco, cuya misión es soportar ladillas que se suben a su chepa desde que nace.

Hace muy poco tiempo descubrí que los demás, en general, no son responsables: Una vecina sin problemas económicos ni mentales que todos todos los días pide un ingrediente que se ha olvidado de comprar, un presidente de asociación que no repara averías, una madre que siempre tiene que hacer llamadas cuando está con sus bebés, una voluntaria para la organización de algo que acabo organizando yo por falta de comparerecencia de la sudodicha…al final si junto todas las anécdotas y miro hacia atras, veo que mi tracking de individuos procranistadores, ladrones, gorrones, vampiros que «no se ocupan» porque han detectado sangre responsable fresca, constituye una nómina inmensa en mi vida.
La de salarios, comidas, méritos que fueron ajenos o tiempo para mis propios hijos que he pagado, por culpa de no darme cuenta que el mundo está lleno de caraduras que no se esfuerzan lo más mínimo en cuanto detectan trabajo ajeno!

¿Debo creer que «Dios» me lo recompensará? ¿No es eso dejarle el trabajo a otro? 😀

Obviamente más me vale no torturarme, al fin y al cabo no tengo ninguna intención de dejar de cumplir diariamente con todas aquellas cosas que considere que son mi obligación, calentamiento global incluido. Pero ¿Debería ponerles trampas a los vagos? ¿Debería dejar que se caigan solos o que se «enganchen» a otro?
¿Es nuestra obligación cuidar de todo cuanto descerebrado nos rodea bajo el epígrafe de «ya sabes como es»?
Coño, pues si yo se como es, que se entere él también y que se esfuerce! Como hacemos todos…
¿O no lo hace nadie y soy yo que tengo un punto masoquista, una extraña pasión por complicarme la vida?

Imagínate que al final de la vida te das cuenta que tanta responsabilidad, tanto cumplimiento, tanto currar y los que más años viven, a costa de los bobos que nos creimos el cuento, son los vagos.
¿Nos engañaron al educarnos?
¿Vivo en un Mundo Féliz hipnotizada, creyendo que no hay nada más y resulta que todo esto es sólo un gran «decorado» para que los «listos» se toquen las pelotas a mi costa?

Los psicópatas son una de mis grandes pasiones y hace algún tiempo leí un libro en donde al reflejar los rasgos de una mente psicopática, describía una serie de indicadores «de bolsillo» para distinguir al enfermo que tu perfecto vecino lleva dentro (a quien le interese el tema le recomiendo al maestro Vicente Garrido).
¿Alguien conoce las alarmas del vago compulsivo? ¿Qué nombre tiene la enfermedad de ser la rémora de la consciencia de otros? ¿Es la inmoralidad la base de los dos problemas?

Para quitarle hierro al tema, que al final, me da igual, peor para ellos; aquí un ejemplo de gente que hace todo lo contrario: los bosé, siempre creando. Solos.

Read Full Post »

El otro día leía una entrevista a Eduardo Mendoza, del que no he leído más que «La verdad sobre el caso Savolta» hace ni se sabe cuantos años. En la casa de Perbes no había demasiado material de lectura y yo me lo leía todo, sin filtro (y cuando lo acabé, me hice socia de la biblioteca de Pontedeume).

Lo cierto es que su punto de vista sobre la literatura actual es muy coincidente con el mío: No he leido los «códigos da vinci» de los últimos años, ni pienso perder mi poco tiempo de lectura en ello. Hace años conseguí finalizar los patéticos «Pilares de la Tierra» y decidí que para perder el tiempo así, mejor veo «Betty la Fea» después de comer y al menos es una actividad que me permite hacer cualquier otra cosa en simultáneo.

¿Cuándo exactamente llegó el fenómeno McDonnals a la literatura? ¿Desde cuando existen las marcas de usar y tirar en las letras?
¿Fue el primero Harold Robbins? Por cierto, me encantaba a los 14 años, es bueno, y mejor para leer con una sola mano.
¿Stephen King? Repetitivo, aunque con obras más que considerables. Si hubiese dejado su carrera en El Resplandor, habría sido suficiente.
¿O ya era algo así, en su contexto, el absolutamente genial Ave Fénix? Genial, con vida de vendedor de best sellers del Siglo de Oro.

¿Cual es la línea entre la literatura im-pres-cin-di-ble en cualquier cena que se precie y la literatura de verdad, la de calidad?
¿Es algo bueno, si se lee mucho? ¿Son las ventas las que definen la validez de una obra? ¿Quién es el listo que decide el límite? ¿Los críticos untados? ¿Los intelectuales partidistas? ¿O quizás la «democracia» de las ventas mediatizadas?
Los puristas dicen que Verdi era un cantamañanas, y aquí el mayor ejemplo que ponen para demostrarlo, pero lo cierto es que popularizó el arte. Y a mí, me encanta.
¿Es el Va Pensiero comparable al Chikilicuatre?

Creo sinceramente que somos víctimas de un mundo intencionadamente complicado para ser vendido:
a) No es posible tanta oferta de creatividad y que sea toda buena.
Hay que producir rápidamente bienes que se consuman con facilidad y que se olviden con facilidad. Y si no se olvidan, los llevamos al cine.
b) Hay que facilitar el consumo.
Hay tanto, que la gente prefiere lo facilón. Es la consecuencia de la cultura del «no esfuerzo».

¿Está el consumismo acabando con la cultura tal y como la concebíamos cuando nos educaron? ¿Pretenden anestesiarnos la inteligencia? Sin duda.

No hay más que pensar que todo es lo mismo: Consumo exacerbado que no produce más placer que el de consumir. El consumo en sí mismo es el fin y no el medio.
¿Qué huella puede dejar en la mente de alguien «Los Pilares de la tierra»? ¿Y Rosa la de Operación Triunfo? ¿y Victoria Beckam? Pues la misma que la colección primavera – verano del 1998 de Zara. Ninguna. Basura de usar y tirar.
La carrera hacia el último gadget está presente en todas partes.

¿Y el sexo? El primer mercado de consumo del mundo.
Pues igual o peor:
Todos convertidos en unos Master&Johnson de todo tipo de posturas y juegos en sus coños de diseño , todos unas máquinas del placer propio y ajeno y si no lo eres cállate!, todos enganchados a las nuevas relaciones sin relación, todos con normas, normas para tocar, normas para relacionarse, normas para disfrutar, preparaciones innecesarias, protocolos, productos, juguetes, cremas, lencería de marca, piercing …pero cuidadito con el compromiso o la emoción, cuidadito con ponerse en el lugar del otro, el placer es placer en la medida en que YO lo proporciono…la sociedad del individuo llevada a su extremo…Con tanta complicación es imposible enamorarse, por Dios!
¿Qué hacen los jóvenes para ser «normales»? ¿Cómo evadirte del este mundo de consumo de placer vacío?
Volvamos todos a los pajares, YA! Volvamos a Susana Estrada y a la época en la que los pechos naturales se llamaban «domingas».

Yo por si acaso, releo las Novelas Ejemplares.

Read Full Post »

Esta mañana una enfermera mileurista soltera y cincuentona ha preguntado donde comprar un bolso de 500 euros, mientras gritaba: Es el nuevo modelooooooo!

Colas de padres de niños que pueden pagarse seguro médico privado, tardando el doble de tiempo que en una consulta de la seguridad social, para ser recibidos por aburridos galenos en prácticas a 5 euros la hora.

Dos horas más tarde una mulata con culo de mulata y tetas de mulata, intentaba disimular el asco ante la cara de un salido que le doblaba la edad, en un Burguer King al lado de un outlet de ropa a 1000 euros. El local olía al sexo de él. Sexo sin lavar. Sexo de asqueroso pajero que se ha importado a una esclava que lo soporte. Puta a jornada completa. Puta respetable.
Normalmente el asco que me producen este tipo de locales en sí mismos, habría superado al asco de un salido; pero mirando su cara podía imaginar su olor y lo único que he podido hacer es intentar no tocar nada. En un momento dado me he visto forrando de asquerosas servilletas la mesa, la silla, los laterales mugrientos de miles de gotas de tomate artificial sedimentado por el sol de Madrid seco.
Desde siempre he tenido la sensación de ser capaz de imaginar la sexualidad de la gente que tengo cerca. Veo a los aburridos, a los vergonzosos, a los acomplejados, huelo a la gente que le pone la caña dura, tengo la certeza que la cuarentona aburrida que vive enfrente es una bomba sexual con tendencias dominantes incontrolables. Se sin ninguna duda que ese conocido tiene una querida de las de toda la vida al mediodía, su mujer le gusta, pero hay cosas que no le pediría.

¿Hay algo en el físico de una persona que explica su sexualidad? ¿Existe algo intuible que nos dice los comportamientos sexuales del personal o soy yo que estoy como un cencerro y me lo imagino todo?

El asqueroso dio por finalizada la comida de fast food y poniendo una evidente cara hacia lo siguiente que le iban a comer, se levantó. De primero.
Ella al pasar por mi lado, me despidió con un «buenas tardes» y una sonrisa. Solidaridad. A ella también le pasa lo mismo que a mí. Ve las almas con su sexo. La diferencia es que yo sólo como hamburguesas cuando quiero.
Suerte compañera, que sea sólo un ratito!

Read Full Post »

Older Posts »